Los treinta a la vuelta de la esquina

Los treinta a la vuelta de la esquina

Esta semana cumplo 30 años. Nooo, nada de felicidades: mejor hablémoslo.

Mi padre a mi edad tenía dos hijos, una esposa y una casa a su cargo. Yo con 30 años tengo una carrera a medio hacer y una incertidumbre que no veas. Aunque sé que en este proceso no estoy sólo, no es menos cierto que llevo unos días dándole muchas vueltas en mi cabeza.

Algunos me dicen: Recuerda que la edad es solo un número; y puede que tengan razón, pero y si no.  De todas formas es algo que no sabré hasta dentro de unos días.

Dicen además que a los treinta, tu vida se resuelve. No saben cuanto desearía que fuese cierto; porque de ser así en apenas una semana dejaría a un lado todos mis dolores de cabeza.

De ser así, en un abrir y cerrar de ojos dejaría de preguntarme si venirme a este país fue una decisión acertada, sabría que este año termino el máster, que tendría un trabajo con el cual pueda  vivir dignamente y que no me preocuparía tanto por el mañana cuando aún estoy en el presente.

Pensaría más en mis logros y olvidaría mis fracasos.

Dejaría de pensar en lo mayor que se hacen mis padres y mis hermanos,  y en lo lejos que estamos los unos de los otros.

Disfrutaría de la independencia financiera que tanto anhelo, que nada tiene que ver con hacer  grandes compras, ni viajes carísimos. Me conformaría con algo tan sencillo como poder ir a un buen restaurante.

Aceptaría de buena fé que nada es perfecto. Que la imperfección añade carácter y dejar ir las expectativas de perfección me ayudará a enfocarme en los cambios positivos de mi vida.

Evitaría compararme con los demás, comería menos chuches y cuidaría más mi salud (adiós al chocolate).

Sería agradecido por el hecho de estar vivo y por todo lo que tengo. Hay muchas personas que no tuvieron la suerte de llegar a los 30 años de edad.

Son pequeñas cosas que domino muy bien en la teoría pero que a veces olvido en la práctica ; y no sé si es el calor, o que dejo atrás los veinti que tan provechosos fueron, lo que me hacen replanteármelo unas cuantas  veces al día.

¿Será qué me ha cogido la crisis de los 30?

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