Asado de noche vieja con Hilda en la distancia

La última vez que me puse de a lleno en la cocina, fue hace unos meses cuando me pidieron un arroz con frijoles coloraos.

Las dudas las consulté en youtube (como casi todo en esta vida) y entre granos, sal y cebolla, me salieron unos frijolitos pa´ chuparse los dedos.

No pensé que me tocaría tan pronto jugar a los cocinaitos; pero la felicidad dura tan poco en la casa del pobre.

Estaba muy tranquilo disfrutando los aires navideños, cuando veo en uno de  los grupos del whatsapp: TE TOCA ASAR LA PIERNITA DE PUERCO.  ASÍ QUE VE BUSCANDO LOS TUTORIALES;  suficiente para no dormir esa noche.

Por suerte para mi y para desgracia de muchos, existe una web colaborativa donde expresamos todo nuestro sentir y  quehacer diario; y para allá fui. Abrí mi mejor facebook, planteé mi inquietud, y antes de lo que canta un gallo, ya tenía todo el apoyo moral para enfrentarme a aquella tarea encomendada por la presidenta del CDR de Pamplona ¿Qué se pensaba ella? AQUÍ NO SE RINDE NADIE. HASTA LA VICTORIA SIEMPRE.

No quiero imaginarme, que hubiese sido de ese asado sin  las clases a distancia,  las indicaciones y la dedicación de mi queria amiga Hilda.

Que mujercita esa para gustarle la cocina; con su cena a medio hacer, pero pendiente a la mía. Yo con mi copita de vino en mano, ella con su ensalada fría. Yo con mi arroz congri, y ella pensando en el adobo, en que no se me secara la carne y en la temperatura del horno.

Entre una copa y otra, risas y cuentos; para las 22.00h ya estaba la carne en su punto y lista para comer.

¿Quejas? Ningunaaaaaa……pasé el examen con SOBRESALIENTE.

Por mi parte, la mejor de las experiencias: una bandeja aún sin fregar, dos dedos quemados, una despensa casi vacía y una resaca de las que ya no hay.

Y ustedes tranquilos, no se asusten si uno de estos días  Hilda les sale con que tiene un suplente en su cocina; el mejor ayudante y aprendiz del Ejército Libertadorrrrrrrrrr.